Analizan la eficacia del raspaje y pulido sistemático en adultos sanos
La técnica también es conocida como “profilaxis”, “extracción mecánica profesional de la placa” o “instrumentación periodontal”.
¿Hasta qué punto es efectivo el raspaje y pulido sistemático en adultos sanos? Esta pregunta fue la clave de la investigación de un grupo de especialistas del Reino Unido e Irlanda cuyo objetivo fue, además, encontrar la frecuencia “óptima” de este método de profilaxis.
Su principal conclusión fue que en aquellos adultos sin periodontitis grave (y con acceso regular a la atención odontológica) el tratamiento de raspaje y pulido sistemático “logra poco o ningún cambio en la gingivitis, las profundidades de sondaje y la calidad de vida relacionada con la salud bucodental durante dos a tres años de seguimiento en comparación con ningún tratamiento programado de raspaje y pulido (evidencia de alta certeza)”.
También, agrega que “se observa que los tratamientos cada seis meses reducen el cálculo más que los tratamientos cada 12 meses durante dos a tres años de seguimiento (evidencia de alta certeza), aunque la importancia clínica de estas reducciones pequeñas no está clara”.
Asimismo, que puede haber poca o ninguna diferencia en los niveles de placa en el plazo de dos años (evidencia de baja certeza).
No obstante, sí afirma que esta técnica profiláctica puede mermar los niveles de cálculo en comparación con ningún raspaje y pulido sistemático.
Para llegar a estas conclusiones, Thomas Lamont, profesor titular de Clínica de Odontológica Restauradora de la Universidad de Dundee (Escocia) junto a Helen Worthington (Universidad de Manchester, Inglaterra), Janet Clarkson (Universidad de Manchester y de Dundee) y Paul Beirne (Universidad de Cork, Irlanda) se dedicaron a analizar investigaciones previas alojadas en la bases de datos del Grupo Cochrane, Medline, Embase Ovid, US National Institutes of Health Trials Registry y en la World Health Organization International Clinical Trials Registry Platform sin restricciones de idioma ni fecha de publicación.
Así, seleccionaron dos estudios con 1711 participantes en contextos de práctica odontológica general del Reino Unido. Además, incluyeron a adultos sin periodontitis grave que acudían de forma regular a las consultas dentales. Uno de éstos midió los resultados a los 24 meses y el otro, a los 36; y ninguno analizó los efectos adversos, los cambios en el nivel de inserción, la pérdida de dientes ni la halitosis.
El trabajo de Lamont y su equipo se plasmó en el artículo Raspaje y pulido sistemático para la salud periodontal en adultos. La misma, as vez, constituye una revisión actualizada de la versión publicada en 2013.