Sonrisa, estética e integración con el medio: también objetivos de la rehabilitación bucal
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En exclusiva, Panorama Odontológico entrevistó al doctor José Valdivia, profesor titular y director del Departamento de Odontología Restauradora y de la Cátedra de Clínica Integral del Adulto de la Facultad de Odontología de la Universidad Andrés Bello de Chile; y especialista en Rehabilitación Oral y Máxilofacial, con mención en Prótesis Fija, Prótesis Removible y Prótesis sobre Implantes.
Valdivia fue expositor invitado en la I Jornada de la Rehabilitación Bucal Actual, organizada por la Cátedra de Técnica de Prótesis Dental de la Facultad de Odontología de la Universidad de Buenos Aires.
Como experto en Restauración, el Profesor indagó en las posibilidades que ofrecen la implantología y la rehabilitación protética, pero siempre con el foco en la atención personalizada al paciente y en el aspecto bio-psico-social de la salud bucal.
¿Qué se entiende por estética en Odontología hoy para poder lograr una buena sonrisa?
Hoy en día la estética odontológica engloba múltiples factores. Cada vez más nuestros pacientes acuden al profesional ya sea por restauración funcional y muchos de ellos por requerimientos estéticos.
Para el odontólogo la estética debe representar algo totalmente individual, que es única para cada paciente y debe conjugar las reconstrucciones protéticas con la armonía dentofacial.
Una sonrisa agradable es una vía de comunicación que habla por sí misma siempre y ese es el principal objetivo que nuestros pacientes buscan en la rehabilitación que nosotros les realizamos.
¿Con qué materiales dispone hoy la odontología para lograr ese ideal estético?
Hoy en día asistimos a un desarrollo muy vertiginoso de todo lo que son biomateriales de uso odontológico. En operatoria dental y en odontología restauradora, todo el desarrollo en base a resinas y materiales que cumplen con muchas expectativas estéticas de nuestros pacientes están a nuestro alcance altamente desarrollados.
Otra área son las porcelanas, con las cuales podemos imitar prácticamente la naturaleza absoluta de los tejidos dentarios; y en rehabilitación protésica, el advenimiento de los implantes con el titanio y el zirconio como material restaurador; o las diferentes aleaciones metálicas que existen para rehabilitar ya sea con porcelana o con resina nos presentan una gran gama de posibilidades de biomateriales disponibles que podemos trabajar para dar forma a las rehabilitaciones protéticas que instalamos en nuestros pacientes.
Lo importante es saber seleccionar qué material está indicado para solucionar cada caso clínico. No existe un biomaterial que sea o que sirva para dar soluciones a todas las opciones clínicas. Ahí está el punto de la indicación de qué tipo de rehabilitación protética requiere el paciente y con qué biomaterial vamos a construir nuestras rehabilitaciones.
Los implantes vinieron para quedarse. ¿Cómo resuelvo la estética en el sector anterior en una rehabilitación implanto asistida?
El área o sector del maxilar superior, el sector anterior es tal vez el área de mayor trascendencia para nosotros los profesionales de mayor exigencia y para el paciente el de mayor importancia pues es lo más visible en su sonrisa y, dependiendo del grado de pérdida ósea de tejidos duros o tejidos blandos, será diferente la terapéutica a implementar.
Muchas veces tenemos pérdida severa de tejidos duros o tejido óseo por traumatismos que hay que reconstruir previo a la instalación de implantes o en conjunto con la instalación de implantes. En cada caso la vía de solución será individualmente estudiada para cada paciente.
Hoy en día existen numerosos materiales aloplásticos que pueden reemplazar o actuar como sustitutos óseos. También existen numerosas técnicas quirúrgicas de tejido blando para manejar los tejidos gingivales y optimizar el entorno en donde va a emerger la rehabilitación protética sobre estos implantes.
Ha pasado mucho tiempo desde que empezamos a emplear los implantes y ya los implantes no se colocan donde solo existe hueso. Si no existe la cantidad suficiente de hueso, habrá que estudiar la forma o la técnica quirúrgica más avanzada para reconstruir, luego implantar y después rehabilitar. Esa es la tónica.
Pero hay que insistir que cada solución estética va a pasar por un análisis definido. Si bien es cierto hoy en día es de uso masivo de los profesionales odontólogos, no hay que olvidar que la implantología es un servidor de la rehabilitación protética.
Por lo tanto, hay un concepto de planificación de tratamiento basado en la rehabilitación protética final. Y se realizarán todas las acciones quirúrgicas o de coadyuvantes para mejorar el territorio del que estamos hablando.
¿Lo estético es compatible con el restablecimiento de la salud bucal en una rehabilitación?
La salud bucal de nuestros pacientes será siempre nuestra meta final. En muchos casos en los que nos encontramos con pacientes con síndrome de reabsorción muy severo de los maxilares superiores, se exigen mayores acciones quirúrgicas de más envergadura y el planteamiento de tratamientos más difíciles que van a hacer que actúen otras disciplinas además de la rehabilitación protética o la propia implantología.
La finalidad última de todo tratamiento odontológico rehabilitador será siempre devolver la salud bucal de nuestro paciente. No hay precepto de rehabilitación, de implantología o de la especialidad dentro de la odontología sin el concepto de salud.
Siempre el objetivo último será devolver la salud bucal. Y eso implica masticación y la deglución confortable para nuestros pacientes, la fonación y la integración social con el medio. Eso es la salud bio-psico-social de nuestros pacientes.
¿Cuál considera es el desafío futuro de la especialidad?
Seguir aplicando las técnicas clínicas ya descriptas y evolucionar. La tecnología se ha preocupado de entregarnos muchas herramientas: tecnología computarizada, tecnología CAD CAM, metalúrgica y desarrollo de biomateriales. Pero la misión principal del odontólogo está en tomar decisiones basadas en la evidencia científica.
En la odontología asistimos a un desarrollo vertiginoso de técnicas y de materiales que se incorporan al uso diario de la clínica. El desafío es buscar estas evidencias científicas. ¡No nos vaya a pasar que muchas cosas que estamos utilizando hoy, el día de mañana encontramos que no eran los materiales más adecuados! Para ello, debemos observar clínicamente y registrar lo que hacemos.